Muchos técnicos profesionales estarán preguntándose cuál es la función principal de esta cámara térmica de Qianli y qué es lo que la hace tan especial para tener que pagar algo menos de 850€. Efectivamente, es un precio que llama mucho la atención y que nos hace cuestionarnos si realmente vale lo que estamos pagando.

Hay que dejar claro que si estamos dispuestos a comprar la cámara térmica es porque contamos con un taller completo, con sus estaciones y herramientas necesarias para cualquier trabajo o reparación, y que añadir este artilugio de Qianli será un plus que nos pondrá un escalón por encima en los análisis de las placas base de cualquier teléfono móvil.

Por tanto, no es algo realmente urgente y necesario, pero sí una herramienta que ‘mola’ bastante 😎. En este post analizaremos aspectos concretos para dejar constancia de si merece la pena comprarla y apostar por una nueva herramienta de Qianli para nuestro taller de reparación.

Funcionamiento del software

Imagen Térmica de Placa Base

Ya de primeras sabemos que estamos comprando una herramienta de marca Qianli, por lo que la calidad no nos va a defraudar. Partiendo de esa base, esta cámara térmica nos ayuda mucho a encontrar consumos pequeños, cortocircuitos y agilizar nuestro trabajo. Al fin y al cabo, siempre queremos ser rápidos y no queremos perder tiempo.

En nuestro análisis de la herramienta nos encontramos con un pequeño escoyo, y ese fue el software de instalación para trabajar con la cámara térmica. No resulta fácil encontrar el enlace de descarga, ni siquiera en la web de Qianli se puede encontrar, por lo que os lo facilitamos a través de este enlace para que podáis descargarlo e instalarlo.

Una vez se ha instalado y se ha abierto, veremos que con el software podemos ajustar manualmente la luz para visualizar los puntos de temperatura de la placa base, al igual que la paleta de colores que más prefiramos para guiarnos con las zonas más calientes y templadas de toda la placa base que se está analizando.

También, el software puede controlar el funcionamiento de toda la placa base del móvil mostrando la temperatura de cada punto exacto de la placa con el mouse del ordenador. Si hacemos la prueba, podremos ver como con solo pasar el cursor los datos se actualizan.

Lo práctico está en lo sencillo

Más allá de las principales características que hemos mencionado, la cámara térmica de Qianli lleva incorporado de serie en su software un modo automático que detecta automáticamente los cortocircuitos, algo que podemos desactivar y hacerlo nosotros manualmente, pero que siempre es una buena ayuda para ahorrar tiempo.

Resulta sorprendente el software tan sobrio que utiliza para el precio final de coste que tiene la cámara, pero hay que comprender que su utilidad es muy necesaria y práctica para cualquier técnico. En cierta medida, lo suyo es que demandemos un sistema más sencillo para que podamos entenderlo mejor y nos ahorre el mayor tiempo posible, pero también es verdad que muchas veces creemos que, a mayor complejidad, mayor trabajo de producción detrás. Y a mayor trabajo, más desarrollo y, por lo tanto, más convencimiento de que es un producto bueno. Pero este no es el caso.

Hemos agradecido, por tanto, que el menú de trabajo no fuera tan denso, sino mucho más directo y llevadero, de forma que se pudieran localizar en todo momento todas sus opciones de interfaz.

¿Recomendamos comprar una cámara térmica?

La respuesta es sí… y no. Realmente una cámara térmica es algo que se debería comprar una vez tengamos todas las herramientas necesarias -hablamos de un buen nivel de profesionalidad- en nuestro taller de reparación. Es decir, cuando nos sintamos cómodos trabajando con un microscopio, una estación de calor o un cautín con los que sepamos sacar el trabajo adelante, ya podríamos replantearnos si queremos comprar una cámara térmica.

Como hemos comentado en este post, al final estas cámaras no hacen más que agilizar el trabajo donde, por ejemplo, tenemos un corto, no calienta nada y necesitamos de la cámara para poder verlo con más precisión. Por tanto, es una decisión muy personal pero que siempre recomendamos.

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